En la actualidad, son muchos los proyectos que entran en nuestro estudio con presupuestos muy modestos, es en estos casos donde mas nos tenemos que esforzar por obtener, con materiales sencillos, los mejores resultados y para ello no podemos olvidar ni dejar de cuidar los detalles, que son los que al final definen la consecución de un buen trabajo. De esta reflexión se deriva el título de este Post.
El último proyecto en el que Lumasa ha trabajado recientemente, es un claro ejemplo para este post: Una vivienda sencilla en un barrio sencillo de la capital. El cliente necesitaba dar una vuelta completa a su casa, cocina, baños, carpintería, ventanas, paredes, techos, instalaciones y ademas conseguir un ambiente plácido y acogedor del que carecía. Su presupuesto: Muy reducido, por lo tanto no nos permitía modificar distribución general. Nos pusimos “manos a la obra”.
Comenzamos estudiando bien la distribución original compuesta de muchas estancias pequeñas y cerradas. Con 2 pequeñas intervenciones a nivel de tabiquería, conseguimos dar una amplitud visual desde la entrada muy importante. La eliminación de puertas de paso y la sustitución de alguna de ellas por paneles correderos, es otro recurso que nos ayudo a ganar espacio y amplitud.
El Antes y el Despues…
Los baños, dos piezas muy pequeñas en esta casa y sin posibilidades de ampliación pues, como ya comentamos, el presupuesto no daba para una redistribución. Con los metros que había, debíamos sacarle el máximo partido y hacerlos más funcionales y atractivos. Platos de ducha de 1,20, muebles de baño de 0,80 con gran capacidad de almacenamiento, gracias a los cajones con gavetas de extracción total y colores claros, junto con un juego de espejos retroiluminados, conseguimos un efecto multiplicador del espacio, ayudado también por el uso del cristal en mamparas de baño especialmente diseñadas para ellos.
ANTES
DESPUES
La cocina, otro elemento de la casa con gran necesidad de reforma, armarios de poca capacidad y una distribución y estética anticuada hacían necesario un replanteo de la misma, pero respetando los metros y accesos existentes.
Estudiamos 2 zonas bien diferenciadas: 1 de trabajo formada por muebles bajos y 1 de almacenamiento con muebles de suelo a techo. Ambas zonas compuestas por muebles con gaveteros grandes, cajones de extracción total y baldas en algunas zonas y con una estética muy limpia, libre de tiradores y con los electrodomésticos nuevos de integración (Frigorífico). Revestimos las paredes con cerámica rectificada de amplio formato y para aprovechar mas los espacios, en vez de puerta batiente, diseñamos un panel corredero para esta función. En el suelo y con el fin de no perder la continuidad que nos da el panel corredero, continuamos con el mismo suelo de toda la casa.
DESPUES
El cambio de carpintería, la utilización de colores claros y cálidos así como un suelo de gran formato, terminan de componer la nueva imagen de este hogar.