Un espacio estrecho y alargado y un limitadísimo presupuesto hicieron a este proyecto de sus debilidades sus grandes virtudes. El juego con la volumetría propia del espacio y la introducción de elementos efectistasfueron nuestras estrategias y la iluminación mediante LED, estudiada de forma perimetral al local, nuestro recurso.
Unas grandes lámparas bola, ayudaron a dar dinamismo y romper la marcada verticalidad del local. Siluetas de personas a tamaño real en la pared principal y puertas de baños, sirven de elementos singulares y de aportación de color en este local de líneas limpias y color blanco. Por último, unas cortinas metálicas bañadas por luz, definen el aire chic que se pretendía.